En la madrugada del 26 de junio de 2020, la tranquilidad de una de las zonas más exclusivas de la Ciudad de México se vio sacudida por un violento intento de atentado contra el secretario de seguridad pública, Omar García Harfuch. En un acto que dejó tres personas muertas y al secretario con múltiples impactos de bala, se revela un oscuro trasfondo de confrontación entre las autoridades y los poderosos carteles del narcotráfico que operan en el país. Este evento, que tuvo lugar en Lomas de Chapultepec, una de las colonias más caras y seguras de Latinoamérica, desató una serie de interrogantes sobre la seguridad en la capital mexicana y las medidas necesarias para hacer frente a la creciente violencia del crimen organizado. A través de este relato, exploraremos los detalles del incidente, sus posibles motivaciones y las repercusiones que ha tenido en el ámbito político y social de México.
A las 6:35 de la mañana, las cámaras de la ciudad más vigilada de México captan cómo una camioneta y un camión de carga son atravesados sobre la avenida de la Reforma, en la esquina con la Av. Monte Blanco, en Lomas de Chapultepec, Ciudad de México, una de las colonias más caras y seguras de Latinoamérica. Más de 25 sujetos están dispuestos a acabar con la vida del secretario de seguridad pública. Su armamento es mucho más poderoso que el de la policía: llevan barrets calibre 50, metralletas de alto calibre, granadas de fragmentación y más armas explosivas.
Omar García Harfuch, junto con su grupo de seguridad, viajan a bordo de su camioneta dura sobre la avenida de la Reforma con rumbo a su trabajo. Al llegar a la esquina de Av. Monte Blanco, se encuentran con el camión atravesado y varios hombres que comienzan a disparar. El sonido y las consecuencias de los disparos retumban por todas partes y son captados por vecinos de alrededor. Una camioneta más trata de encapsular al secretario y su equipo, cerrando la retaguardia para evitar cualquier escape. Cientos de disparos impactan la camioneta blindada del secretario, mientras sus escoltas intentan salvarlo del atentado, piden refuerzos a la policía, quienes llegan en unos minutos.
El segundo grupo de sicarios, quienes se encontraban debajo del camión, suben a la camioneta en la que llegaron y huyen del lugar, abandonando al otro grupo que se rinde ante los policías y son arrestados y subidos a la patrulla.
El saldo de este aciago e histórico hecho en la Ciudad de México es de 3 personas muertas. La información hasta ahora dicta que 2 miembros del equipo de seguridad del secretario y un ciudadano que estaba en el lugar murieron, mientras que el objetivo, Omar García Harfuch, tiene 3 impactos en el cuerpo pero se encuentra fuera de peligro. De inmediato tuiteó sobre el hecho y adjudicó el ataque al Cartel de Jalisco Nueva Generación.
Según el periodista Raúl Cortés, el gobierno federal sabía sobre ataques que se planeaban contra funcionarios que habían dado golpes al Cartel de Jalisco Nueva Generación, pues habían interceptado audios de miembros del cartel.
Marcelo Ebrard, por firmar la extradición del Menchito, hijo del Mencho, líder del cartel.
Santiago Nieto, por bloquear 2000 cuentas de banco ligadas al cartel.
Alfonso Durazo, cabeza de la lucha contra el narco a nivel nacional.
Y el único que no pertenece al gabinete federal, Omar García Harfuch, de quien he hablado en pasados notiñeros, por ser señalado por Anabel Hernández de haber formado parte del equipo de García Luna y quien también ha encabezado fuertes operativos en contra del Cartel Jalisco Nueva Generación, principalmente contra sus socios La Unión Tepito en la capital de la ciudad, deteniendo a varios de sus miembros y líderes del grupo criminal.
Según el periodista Héctor de Mauleón, aunque AMLO ha dicho que abrazos no balazos, el Mencho es el objetivo principal del Gobierno y ya lo traen cerca. Por eso la agresividad con la que ha reaccionado contra quienes han golpeado su estructura delictiva, que comenzó, según los periodistas, con el asesinato del juez Uriel Villegas, quien firmó la orden de pasar de un penal de Oaxaca al de Puente Grande en Jalisco, a Rubén Oceguera González, El Menchito, quien ya está en Estados Unidos extraditado.
La seguridad de los miembros del gabinete, así como la del propio presidente, fue reforzada después de saber de la venganza que planeaban miembros del cartel, así como también saben del video de otro líder criminal, El Marro, quien ha amenazado con una escalada de violencia en su estado. Se pudo haber evitado, no lo sabemos. Lo que sí es que se están golpeando fuertemente los intereses de 2 grupos muy poderosos; armados y acorralados, pueden hacer lo impensable.
Del grupo de sicarios que fue abandonado, ninguno opuso resistencia y hasta ahora han sido detenidos 14 hombres, quienes fueron puestos a disposición de la autoridad.